un gran despertar sobre el daño ambiental y cómo podemos implementar nuevas estrategias para cuidar el planeta.

Posteriormente, Júpiter entrará en Géminis donde buscará nuestro crecimiento y expansión a través de la comunicación, el nacimiento de nuevas ideas y la flexibilidad mental. Y, por primera vez en nuestras vidas, veremos a Júpiter en el signo de Géminis conectando con un Plutón en Acuario a través de un trígono de aire; esto se dará en junio y es muy especial porque acelerará todos los cambios que trae el planeta de la transformación.

Este evento nos ayudará a adaptarnos a todos los cambios que estaremos atravesando y a manifestar menos resistencia ante el avance tan vertiginoso que se dará en el mundo. Habrá mayor curiosidad por experimentar y una postura mental más abierta ante lo diferente. Personas visionarias cuestionarán el sistema actual y propondrán ideas progresistas que promuevan el cambio y la innovación. Esto afectará los sistemas educativos donde empezará a verse la necesidad de actualizar la manera en que se imparte el conocimiento, sobre todo a nivel básico. Así mismo, el avance tecnológico que impulsará Plutón hará surgir nuevos medios de comunicación en donde el nacimiento de nuevas redes sociales no tardará en llegar.

En fin… este aspecto Júpiter-Plutón propone un mundo todavía más globalizado que en el que ya vivimos.

Por último, a final de año Júpiter entrará en una configuración que mantendrá desde octubre hasta diciembre. Se trata de una T-cuadratura, una configuración tensa que involucra a 3 o más planetas. En esta ocasión, los protagonistas serán Júpiter en Géminis, Saturno en Piscis y Venus, Mercurio y el Sol visitando Sagitario.

De manera simple, el final del año nos verá, como siempre, planificando lo que será el 2025, sin embargo, esta configuración nos indica que tendremos que esperar hasta el segundo mes del próximo año para empezar a ejecutar todos esos planes.

Verán… las oposiciones entre planetas en Sagitario a Júpiter en Géminis indican grandes planes e ideas que vamos a querer implementar antes de que se acabe el 2024, pero la cuadratura de todos estos planetas a Saturno en Piscis indica que antes de ejecutar debemos evaluar si esos planes tienen estructura o si son meramente “castillos en el aire”. Y realmente estaremos reflexionando en torno a esto, ya que en diciembre Mercurio tendrá su última retrogradación del año y activará la T-cuadratura 3 veces.

En un contexto más amplio, esta configuración quiere que estemos realmente seguros de los planes y sueños en los que estaremos trabajando más adelante, y con Mercurio retrógrado muchos estarán cambiando de opinión sobre lo que desean hacer en el 2025 o ejecutando cambios en el plan que tenían, por eso será mejor esperar hasta tener la mente más clara.

Fernando Leone
Astrólogo